Haiku
El haiku es un poema contemplativo que valoriza la naturaleza, el color, la estación, los contrastes y las sorpresas. Debe registrar o indicar un momento, sensación, impresión o drama de un hecho específico de la naturaleza. Es casi como una foto instantánea.
Más que inspiración, se necesita meditación, esfuerzo y percepción para componerlo, intuición, lejos del razonamiento.
la historia de haiku como tal, empieza en los últimos años del siglo 19 con la reforma de Masaoka Shiki* hacia el año 1892 al establecer el haiku, como una forma poética independiente del renga* y su original hokku*. Esta reforma no cambió dos elementos tradicionales: la división de 17 sílabas en tres grupos de sílabas (5-7-5) y la inserción de un tema estacional, Kigo*
Admitir que haiku es enlazar con la naturaleza y con el ser humano a través de la contemplación-observación y dejar que la iluminación haga el resto, es reconocer que en esa "naturaleza y ser humano", se halla lo "urbano" indisolublemente asociado a ellos.Haiku urbano, es participar de la naturaleza urbana y atestiguarla a través de la mano del haijin.
En cualquier rincón de nuestras ciudades,en las relaciones humanas,la naturaleza artificial,en cualquier momento, hay un haiku por descubrir.
El ser humano capaz de "visionar" la belleza en lo cotidiano y expresarlo en forma de haiku, reconoce implícitamente, que es capaz de desvincularse del "mundanal ruido", que altera con enorme facilidad nuestra relación “mundo-yo”. Son “otras voces” las que nos llaman a formar parte de este singular género, un tanto novedoso que implica reconocer la existencia del haiku urbano, per se.
¿Podríamos desde esta perspectiva afirmar la existencia de haiku urbano como género? Sin lugar a dudas, la respuesta sería afirmativa. Las premisas ya han sido expuestas, pero ¿cómo llevarlo a cabo?
Los “urbanos” nos vemos envueltos en una sociedad que sacia su afán de consumo por medio del “bombardeo”, entre los que se encuentran los mass media. Las relaciones humanas, cada vez son más individualistas, se rodean de la gran agitación en las que las ciudades se ven sumidas, y en medio de tal caos…¿es posible hallar un haiku? ¿un haiku urbano?
Si eres capaz de “visionar”, como decíamos antes, lo cotidiano como parte de la actividad, física y mental, y contemplar su belleza, y más aún, determinar que está en el instante…entonces estas dispuesto a recibir en tu mano un haiku, un haiku urbano. Abstraerse del “stress” que absorbe cada momento en la vida del “urbanita”, y permitir ese instante de relajación, de contemplación, de intuición, es aparse del “yo”, para entrar en “el otro”, en “lo otro” y atestiguarlo.
Si somos capaces de hacerlo, somos capaces de descubrir la esencia del haiku urbano, seremos capaces de desarrollarlo con unas características propias, y facilitar, tal vez, las relación ser humano-ciudad, ser humano-relaciones, ser humano-naturaleza con el fin de hacerlas más armónicas, más afables, más cuidadas. ¿quién sabe?
jueves, septiembre 28, 2006
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1 comentario:
que tal Jose Luis , por casualidad he topado con tu blog ,...soy de España y busco publicar algo de mi trabajo ,..
aqui te dejo mi web:
www.josedarias.tk
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